Preparados para sufrir. Los reconocimientos médicos, que transcurrieron con normalidad, darán paso hoy al comienzo del trabajo físico. Descansados tras unas largas vacaciones y, por tanto, preparados para ponerse el mono de trabajo. Los siete integrantes del TAU que dieron ayer el pistoletazo de salida a la pretemporada con los pertinentes reconocimientos médicos y analíticas son conscientes de que van a sudar de lo lindo en las próximas semanas a las órdenes de Ivanovic. Así lo expresaron ayer durante el primer día oficial de trabajo, dedicado a la realización de diferentes pruebas de esfuerzo bajo la supervisión de Alberto Fernández para evaluar su estado físico. Dragic, Nocedal, Vidal, San Emeterio, Mickeal, McDonald y Splitter, los únicos presentes, empezarán hoy mismo a comprobar los estrictos métodos del técnico montenegrino, que no cuenta, eso sí, con su plantel al completo. Rakocevic, todavía en su país con un permiso especial del club, se reincorporará mañana; Teletovic lo hará bien entrado el mes de septiembre tras la disputa del Preeuropeo con Bosnia; mientras que la vuelta de los olímpicos Prigioni y Barac se halla supeditada al resultado de sus selecciones en la cita de Pekín. El capitán Sergi Vidal , que junto al base argentino y Splitter son los únicos habituados a las duras pretemporadas con Ivanovic, asumió que el trabajo de estas semanas es "una parte importante para luego hacer otras cosas. Sabemos lo que hay y seguro que se hará duro, pero hay que hacerlo para afrontar con garantías la temporada". San Emeterio , el único fichaje con excepción del regreso de los cedidos Dragic y Barac, valoró sus primeras horas como baskonista. "Estoy con ganas de empezar a trabajar. Es un paso grande en mi carrera, el salto a un equipo grande de verdad. Di un paso bueno pasando de Valladolid a Girona, pero esto es diferente y voy a intentar aprovecharlo". Quien no tiene el puesto asegurado aún en la primera plantilla es el bisoño Matías Nocedal , al que Ivanovic seguirá con lupa durante los próximos días para buscarle un acomodo como tercer base. "No me queda otra que trabajar duro y ganarme su confianza. Vendré a entrenar todos los días sin idea de lo que pasará en el futuro. La puerta está abierta y me encuentro aquí por algo, pero aún no sé con certeza si albergo alguna posibilidad", reveló. El base argentino se mostró partidario de una cesión en el caso de que no vaya a disputar minutos de calidad en la capital alavesa. "Me han salido opciones para jugar en otro club como primer o segundo base, pero a lo mejor eso me sirve lo mismo que jugar aquí cinco minutos como tercero. Eso es relativo". La piedra angular del proyecto, Tiago Splitter , se mostró exultante de felicidad tras haber renovado su contrato hasta 2012. "Estoy muy contento del paso que he dado. Así podré crecer más en la ACB y la Euroliga. Aquí tendre otro peso y el hecho de jugar y pelear por todos los títulos es algo que te motiva". El turno final fue para los dos estadounidenses. Mickeal y McDonald representaron la cara y la cruz durante el pasado curso. El pívot no dio una a derechas y ahora espera ser una pieza útil. "Primero hay que ver las oportunidades que me dan y luego aprovechar cada momento. No he pensado en el año pasado. Tuve mis diferencias con el anterior entrenador, pero él ya no está aquí y yo sigo", explicó. El alero de Rock Island, por su parte, matizó que ha descartado jugosas ofertas. "Equipos rusos, el Barcelona y el Olympiacos estuvieron muy interesados en mí, pero quería quedarme. Aquí hay una buena organización". Texto tomado del Periódico "Diario de Vitoria".
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